Nada más llegar veo que además de oleaje y turbiedad hay mar de fondo y las olas rompen justo por donde tengo que entrar, por un segundo dudo en darme la vuelta y volver mañana pero que narices ya que estoy aquí no voy a dejar pasar la oportunidad. Me meto al agua y lo primero cargar el fusil, me habían comentado que debido a lo retrasado del mecanismo y el estiramiento de las gomas de 16 al 400% costaba bastante trabajo cargarlo. Solo decir que difícil de cargar es mi Gabbiano, o el Avispa Roja que tenia antes que llevaba las gomas cortas cortas, este se carga con bastante facilidad y ya no te cuento si utilizas el primer tetón para cargar en dos tiempos. Viendo lo fácil de la carga lo primero que te viene a la cabeza es que la doble goma de 16 es una metida y el nuevo Abellán a perdido potencia. Primera bajada, caigo sobre un bolo y me aparece la corva enorme, me acuerdo de Gorka y de aquello de si detrás esta la piedra no dispares que la varilla se jode pero como lleva dos gomitas y la varilla es dureza 52 un segundo después traspaso el corvón, resultado varilla doblada en el primer disparo. He pegado mil varillazos a piedras con el avispa roja con gomas muy cortas y nunca había doblado una varilla, va a ser que las gomitas si que tiran fuerte.
Enderezo la varilla y sigo, a la vuelta de una punta veo 3 doradas majas a media agua, nadan contra corriente permaneciendo estáticas y fuera de disparo, intento arrimarme pegado al cantil pero el mar de fondo me lanza contra la pared y no me deja avanzar con seguridad, así que intento un acecho para ver si consigo pillarlas desde abajo, el fusil con el rebaje de masa, el cabezal mas delgado y la menor longitud gana claramente en movilidad con respecto a versiones anteriores y aun con mar de fondo se mueve con relativa facilidad, disparo lejano desde abajo, resultado doradas corriendo hacia el espumero. Nunca he tenido buena puntería disparando de abajo hacia arriba en diagonal, así que no tengo en cuenta este fallo. Tras buscarlas por el espumero veo que han desaparecido.
En el siguiente bolo hay bastante movimiento de castañuelas y preparo un acecho/espera, bajo a 8 metros me arrastro por el fondo y cuando encuentro un buen puesto empiezo la espera. En el límite de la visibilidad se entrevé un banco de espetones, no son muy grandes pero hay muchos, están fuera de disparo y alargo la apnea a ver si entra alguno, a media agua por encima de los espetones un banco de lechas hace apto de presencia y unos dentones se arriman por mi izquierda, la estampa es preciosa, estoy casi totalmente rodeado de depredadores pero ninguno entra. La siguiente bajado la hago en 14, justo donde ví los espetones a ver si ahora tengo alguna pieza a tiro. Las lechas desaparecen y el banco de espetones también, sin embargo algún ejemplar grande de esos solitarios se ve en la parte baja del bolo pero están en plena caza y solo los veo pasar de lejos.
Bajo otra vez y por fin uno de los dentones se viene conmigo, decido que es el fin de la jornada, llevo solo dos horas en el agua pero el mar de fondo empieza ha hacer estragos en mi barriga. Camino de la orilla aun me ha dado tiempo a coger un golfas (nunca había visto uno por mi zona) y una lubina de ración.
COMENTARIOS:
En relación con el avispa roja que era mi antiguo fusil titular el nuevo modelo de Abellán tiene una evidente mejora en la movilidad, menor retroceso y como mínimo la misma sensibilidad de gatillo (sino mejor).
En cuanto a certeza de disparo sigue en su línea y es excelente, los problemas con el carrete han desaparecido y esta perfectamente equilibrado (como siempre).
Estéticamente es más bonito que anteriores versiones, no sirve para nada pero se agradece tener entre las manos un fusil bien acabado.
Creo que la evolución del nuevo modelo con respecto a los anteriores esta muy conseguida y que la marca puede estar contenta del producto obtenido.