Reflexiones Dentoneras 2

Las ultimas salidas me han dejado un mal sabor de boca, en muchos lances el pez solo te deja opción de ver como se bate en retirada pero en otros estoy seguro de que se pudo hacer mucho más. He fallado en aspectos técnicos fundamentales y lógicamente si sumas fallos luego el pasador lo nota. Al menos tengo claro en que he fallado y como corregirlo. Hoy quiero comentar dos aspectos muy importantes de la técnica de pesca, ya no solo para el dentón sino para cualquier presa.

Respiración:

La realización de una correcta ventilación antes de la inmersión va a condicionar en gran manera la profundidad y el tiempo al que podamos pescar, por ello, es sumamente importante preparar la bajada correctamente, durante el tiempo necesario y sin hiperventilar. La forma correcta sería la siguiente:

1. En superficie debemos relajarnos, permaneciendo boca abajo, respirando con normalidad por el tubo y bajando pulsaciones. Dichas respiraciones no deben de ser completas ni al inspirar ni al espirar, simplemente respirar. Cuando las condiciones del mar no nos permitan flotar libremente sin que nos lleve la corriente, la relajación se puede hacer sujetándose con una mano a la boya que estará fondeada, de esta forma no nos moveremos de la zona donde queremos hacer la bajada.
2. Las respiraciones deberían ser diafragmáticas, así iremos calentado el musculo diafragmático. Sobre esto no voy a incidir porque es un tema muy hablado y del que se puede encontrar amplia información en Internet.
3. Una vez notemos que nuestras pulsaciones han bajado (para ello incluso llegan a pasar varios minutos) y que estamos totalmente relajados procederemos a realizar tres respiraciones completas llenando los pulmones en este orden: Parte diafragmática, parte torácica y parte clavicular. Dichas respiraciones deben ser lentas y profundas con un ratio de inspiración/espiración 1 a 2, es decir, por cada 7 segundos de inspiración deberían haber 14 segundos de espiración. Lo ideal seria que estas tres respiraciones completas se realizaran en 1 minuto aproximadamente. Es importante no realizar más de tres respiraciones completas ya que correríamos el peligro de hiperventilar.
4. Tras la tercera inspiración completa procederemos al golpe de riñón para empezar la bajada.
5. Todo el proceso anterior será más efectivo si lo realizamos con los ojos cerrados, ya que así nos concentramos mejor en las sensaciones que el cuerpo nos transmite y la relajación es más fácil.

En el video se ve claramente como hacer una respiración completa llenando las tres partes que antes mencionábamos pero se debe hacer aplicando el ratio 1 a 2 y mucho más lento. Cuando dice “Todo este proceso debemos realizarlo varias veces en el agua antes de realizar la inmersión”, varias veces serán 3, no más para no hiperventilar.



Técnica de bajada:

Esta técnica la podemos dividir en dos partes: El golpe de riñón y el aleteo.

-El golpe de riñón debe de ser enérgico pero a la vez discreto, es decir, que con el solo movimiento debemos bajar al menos 2 metros o lo que es lo mismo que las aletas desaparezcan bajo el agua, de esta forma al iniciar el aleteo no chapotearemos con el agua en superficie y no comenzaremos la bajada produciendo ruido que alertaría a los peces de nuestra presencia. Un error usual del golpe de riñón es describir al hacerlo un ángulo mayor o menor a 90º con lo cual posteriormente debemos corregir nuestra posición para obtener la verticalidad al bajar.

-El aleteo debe de ser fluido y la velocidad de bajada inversamente proporcional a la visibilidad del agua. A partir de la profundidad en que veamos el fondo reduciremos la velocidad de bajada para que los peces se perturben lo menos posible con nuestra llegada. A partir de la profundidad en que la flotabilidad es negativa dejaremos de aletear y aprovecharemos la inercia para seguir con la bajada, si esta es demasiado rápida con abrir ligeramente las aletas se reduciría la velocidad. Cuando lleguemos al fondo no nos apostaremos directamente en él sino que describiremos un movimiento de “L” para aprovechar el relieve y situarnos unos metros más allá del lugar de caída. Esto sirve para desubicar al pez y que no sepa el lugar exacto donde estas. Errores frecuentes en el aleteo son el llamado moviendo de pedalada (no transmite bien la energía de la pierna a la pala), bajar perdiendo la verticalidad por levantar la cabeza (poco acuicidad),  y una velocidad excesiva (gasto innecesario de oxigeno/energía).

Durante la bajada el fusil debe de ir bien pegado al cuerpo para intentar ocultarlo en cierta medida, los peces saben lo que es un fusil y actúan en consecuencia.